Hasta muerta, besaré tu boca.
Símil: Y el tercero es un vino de Sicilia. Ese vino es rojo como sangre3 Pensamientos, 3 Sentimientos, 3 Sensaciones
1. Sin ti, Escarlata...
2. Tu, víbora escarlata...
3. Mi cabeza, por ti, duele.
Dale sentido a tu apellido
No me mires con esos
Ojos, siento una montaña
Rusa que genera
Intensamente mariposas en mi
Estómago y el único testigo es el
Gato que me
Acompaña cuando enamoras mi corazón.
TANTAS DUDAS, TANTAS INTERROGANTES.
Me encontraba viendo la televisión, cuando de un segundo a
otro comencé a escuchar unos sonidos bastante raros e inexplicables. Me costaba
descifrar si era dentro o fuera de la casa, aún así, decidí salir a ver qué
ocurría.
Al salir, me conseguí una estructura en el cielo y algo
cerca de las casas. Ésta tenía unos colores oscuros, marrón, negro, gris, algo
escalofriante. Mientras detallaba lo que veía una personita muy extraña se
acerca a mí tomando mi mano. Bajé la mirada y salté del susto, ya que era algo
muy extraño, algo así como… un extraterrestre.
Luego de analizar la situación, aplico lo que tanto me gusta
hacer, eso de ser reportero anónimo. Me acerco a él y le pregunto:
-
¿Qué es todo esto?
-
Venimos a invadir tu tierra – Respondió
Me quedé callado por unos segundos, la voz era bastante
confusa y además tenía mucho miedo.
-
¿Y esa estructura en el cielo? ¿Qué es? – le dije.
-
Nuestra casa, ahí nos quedamos durante varios
días. Así los podemos observar e investigar todo lo que hacen. Para eso bajamos
en las mañanas y subimos en las noches.
Todo era muy extraño. Corrí, entré a mi casa y cerré la
puerta con seguro. Me senté durante unos minutos en la sala de la casa y se me
ocurrió la brillante idea de escribir sobre todo esto que estaba sucediendo.
A la mañana siguiente, decidí salir, pero esta vez me
acerque a la casa de los vecinos. Estas criaturas aún no estaban en la tierra,
supongo que seguían en su “casa”. Si es que se puede llamar así. Cuando hablé con los vecinos, noté que estos actuaban un
poco extraño, no eran los mismos de siempre y me preocupaba un poco. Estando
con ellos, los vecinos, esta criatura apareció y volvió a tomarme la mano, a lo
que rápidamente estos corrieron dentro de su casa y por la ventana me veían con
cara de miedo, preocupación, estrés. Sentía que querían advertirme de algo pero
no sabía porqué, aún no me ocurría nada por lo cual debería estar preocupado.
Volví a bajar la mirada y decidí realizarle algunas
preguntas, de esas que se me había ocurrido aquella noche.
-
Ayer me dijo que querían invadir nuestra tierra,
pero tengo una duda ¿tienen otro plan además de ese?
-
A lo que respondió – Si, nosotros buscamos
cambiar la forma de pensar de las personas para poder dominarlas.
-
¿Qué? Usted está loco, eso no se puede hacer. Buscaré
ayuda esto no puede suceder- me retiré del lugar y segundo después…
-
Joven, tenga cuidado con lo que hace, podemos
actuar en su contra.
Me detuve y volteé a verlo.
-
Sabemos que es reportero y por eso aún no hemos
realizado nada en contra de usted. Termine de realizar su trabajo. Yo lo
ayudaré, mientras usted quiera.
Me di media vuelta sin responder nada y regresé a mi casa. De
nuevo a mi sala para seguir pensando sobre todo lo que estaba sucediendo con
estas criaturas.
Luego de horas analizando, pude entender que me estaba
manipulando, que estaba manipulandome. Supongo que así deben comenzar ¿no?. Tantas
dudas, tantas interrogantes...
Amanece, es lunes y me dirijo preocupado a mi trabajo sin
hablar con nadie y al llegar me doy cuenta que todos se encuentran muy
preocupados, ya que han llegado “unos
extraterrestres que invaden a la tierra para ocupar a los cuerpos y mentes de
sus habitantes”. Había miedo, no sabían qué hacer. No era una situación
sencilla y para ayudarlos y que tomaran precauciones, decidí comentarles acerca
de estas criaturas que se encuentran en nuestra tierra. Estuve por mucho tiempo
hablando y al terminar les dije que abandonaría el trabajo por lo que quedaba
de día y me iría de casa para seguir investigando.
Estaba seguro que no se enterarían de que había hablado en
el trabajo de ellos, por eso lo comenté y estaba seguro de que sería así.
De regreso a casa me consigo nuevamente con este extraño,
este extraterrestre, justo en la entrada de mi casa.
-
¿Qué hace usted aquí? De nuevo – Le pregunté
-
Le dije que tuviese cuidado con lo que hacía, yo
lo estaba ayudando- dijo
-
Debo advertirles acerca de ustedes, no nos van a
invadir- grité
-
Cuando menos te lo esperes, todo esto va a ser
nuestro
-
Pues no tengo miedo, todos aquí me van a ayudar
porque saben que todos y cada uno de nosotros somos únicos en esta tierra, que
cada uno aporta lo necesario para una buena vida en sociedad, para ser lo que
somos hoy en día, para apoyarnos y entre tantas cosas más. Por eso, si ustedes
llegan a invadir esto no van a lograr nada, todos serán iguales a ustedes y
nada tendrá sentido.
Me retiré y él también sin decir una palabra.
Quizás fui arriesgado al decirle todo lo que pensaba y todo
lo que sentía dentro de mí. No aguantaba más. Ellos no son nadie para quitarnos
lo más preciado que tenemos y siempre lucharé, así sea solo, por todo esto que
tenemos.
Durante la noche volvieron estos sonido extraños, pero esta
vez no decidí asomarme, tenía varías cosas en mi contra y sinceramente tenía
miedo. Así que esperé a que amaneciera.
Durante la mañana hice mi rutina de todos los días y antes
de salir consigo una especie de carta, supongo que llego por debajo de la
puerta. Debo ser sincero, pensé que erra una especie de trampa o algo así que
me habían mandado de allá arriba. La abro y decía:
Querido Humano, nunca pude saber su nombre.
Quiero darle las gracias por hacernos entender todo lo
que es esto para ustedes. Primera vez que nos dicen algo así, las cosas acá
fueron más difíciles de lo que pensábamos. Debo admitirle que gracias a usted
pudimos entender que no necesitamos de esto para ser felices, que no
necesitamos modificar la mente de las personas porque solos podemos hacer lo
que mas nos gusta.
Ayer reunidos durante la cena estuvimos hablando y
comentando lo que pensábamos acerca de nuestra casa y llegamos a la conclusión que
es así tan especial como la tierra para ustedes, que las personas que nos rodean
son tan necesarias como las que nos rodean a nosotros, que todo lo que aportamos
en esa mesa nos sirvió para entender muchas cosas y además de eso pudimos
entender que gracias a todas esas cosas es que conocemos lo que sabemos.
Gracias por todo, les debemos una disculpa y espero que
nos disculpes tu también. Por favor comparte esto en tu blog que me gustaría
que todos tus seguidores se enteren de la gran persona que eres y las disculpas
que tenemos hacia ellos.
ADIÓS.
Salí corriendo de mi casa y cuando miré al cielo ya no
estaba… no se me pasó nada por la mente, solo un suspiro de alivio y
tranquilidad.
El problema es que ahora solo quedaron más dudas y más interrogantes…
- Mango
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